El veinticinco llegó, como siempre lo hace, después del veinticuatro y antes del veintiséis. Ayer, me quedé despierto hasta tarde una llamada que nunca llegó. Ayer, también, y siguiendo los consejos de Jaime, me estaba obligando a escribir. Sentía la necesidad de hacerlo pero las palabras se me amontonaban y escapaban debido a la blanca noche de anteayer.
Nuevamente, ésta no fue una blanca navidad. Pudiera haberla hecho que fuera blanca pero tanta blancura a veces resulta demasiado.
Ahora, cuando a cada hora que pasa se avecina el veintiséis, es cuando más me cuesta hacerme a la idea de que dentro de algunas horas regresará el delirio y que dentro de algunas más tendré que regresar a mi vida de ciudadano responsable.
Estas últimas semanas han sido deliciosas. Mas me cuesta, cuando disfruto tanto el dormir hasta tarde o despertar con un beso, cumplir con todo lo demás.
Esta noche, finalmente, la espera llegará a su fin y seré quien nunca antes fui.
4 comentarios:
oiga...paso por acá a saludarlo y desearle un nuevo año de pelos!
abrazos
pacita
OoLaa beToo
pz Ojala ke zi bengazz en febreroo
pz te llamamoz el 24 pero no conteztaztee :S
nO pzz ya vas tener otro
sobrono
alomejor ya te dijeron verdad?
pero ps buenoo yaa me da pena ai andar diciendoo :S
ya me voi ps kuidatee te kieor muchototee ya sabess
felicidad y alegria 2008 ojala se reconcilie con el amor que lo amen mucho y lo mismo espero para mi besos desde frio new york
ke ondas, ps feliz anño nuevo, kamara Dios t bendiga
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